Un equipo de investigación dirigido por Yan Zeng, científico del Departamento de Energía de Lawrence Laboratorio Nacional de Berkeley (Berkeley Lab), ha construido un nuevo laboratorio de investigación de materiales donde los robots hacen el trabajo y la inteligencia artificial (IA) puede tomar decisiones de rutina. Esto permite que el trabajo se lleve a cabo las 24 horas del día, acelerando así el ritmo de la investigación.
Las instalaciones y dispositivos de investigación han recorrido un largo camino a lo largo de los años, pero la naturaleza de la investigación sigue siendo la misma. En el centro de cada experimento hay un ser humano que realiza las mediciones, comprende los datos y decide qué pasos tomar a continuación. En el A-Lab instalado en Berkeley, los investigadores liderados por Zeng quieren romper el ritmo actual de investigación con robótica e inteligencia artificial.
¿Qué es un laboratorio?
A-Lab tiene 600 pies cuadrados y está equipado con tres brazos robóticos y ocho hornos. El trabajo en el concepto comenzó en 2020 y, con fondos del Departamento de Energía, la construcción comenzó en 2022 y se completó en poco más de un año.
El papel de A-Lab es fabricar nuevos materiales que puedan usarse para construir una gama de nuevos productos, como celdas solares, celdas de combustible, termoeléctricas, que generan energía a partir de diferencias de temperatura, y otras tecnologías en el sector de la energía limpia.
Los científicos han estado utilizando métodos computacionales para predecir nuevos materiales durante muchos años, pero probar la sustancia ha sido un gran cuello de botella debido a que es un proceso muy lento. En el laboratorio A, el proceso se puede acelerar hasta 100 veces en comparación con un ser humano.
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