Zimbabue suprime la pena de ahorcamiento

Los registros del gobierno de Zimbabwe muestran que hay más de 60 prisioneros condenados a muerte.

Las sentencias de 62 condenados a muerte en Zimbabwe podrían conmutarse por cadena perpetua cuando el gobierno aboliera la pena de muerte en 2024.

Así se reveló el martes tras la primera reunión de gabinete del año presidida por el presidente Emmerson Mnangagwa.

Está previsto que la abolición entre en vigor mediante el proyecto de ley de abolición de la pena de muerte del Miembro Privado.

Según el Ministerio de Información, Radio y Televisión, «Se espera que la nueva ley imponga penas de larga duración sin perjuicio del derecho a la vida. La presencia de circunstancias agravantes puede conducir a la pena de cadena perpetua».

En la actualidad, el artículo 48 de la Constitución de Zimbabwe establece que la pena de muerte sólo puede imponerse por asesinatos cometidos en circunstancias agravantes y sólo puede imponerse a hombres de entre 21 y 70 años.

Los registros del gobierno muestran que todavía hay 62 presos condenados a muerte.

Los últimos prisioneros ahorcados en 2005 fueron los criminales notorios Stephen Chidhomo y Edgar Masendeke, el dúo que lanzó la única fuga exitosa de la prisión de máxima seguridad de Chikurubi en 1995.

Zimbabue no tiene actualmente ni siquiera un verdugo, a pesar del interés de los solicitantes de empleo en 2022, entre ellos dos mujeres.

Hasta el año pasado, la pena de muerte todavía se aplicaba en 30 países del continente.

Pero en la última década no se han llevado a cabo ejecuciones en 16 de estos estados o territorios. En 14 países se utiliza habitualmente la pena de muerte.

Entre ellos figuraban Nigeria, Botswana, Somalia, Uganda, la República Democrática del Congo, Etiopía, Sudán del Sur, Sudán, Egipto y Libia.

La pena de muerte ya ha sido abolida en 26 países africanos.