Gente de la Safor

Bienvenidos a Spain News Today.

Los solicitantes de asilo expresan su «frustración» con IPAS después de su impactante traslado a la Irlanda rural

Si bien aprecio los esfuerzos de los reporteros de Gribet por resaltar temas que los principales medios de comunicación evitan o distorsionan, considero que esta entrevista es engañosa y carece de información importante.

A continuación se encuentran tres mujeres entrevistadas que parecen tener hijos, pero no se menciona ni el lugar ni nada sobre los padres de sus hijos. Son principalmente ellos quienes deben asumir la responsabilidad de sus esposas e hijos.

Son mujeres de África que hablan inglés con fluidez. Su acento indica que son de algún lugar de Sudáfrica y no de un país de África occidental como Nigeria o Ghana. No hay guerras ni guerras civiles en esa región, a pesar de la grave sequía que azota Zimbabue, donde 9 millones de personas necesitarán ayuda alimentaria hasta marzo de 2025.

Para el zimbabuense medio viajar a Irlanda desde Harare, estas mujeres y sus hijos habrían costado una fortuna, aunque era algo más barato que Johannesburgo en Sudáfrica. Si tuvieran las habilidades y los medios necesarios, habrían podido solicitar un trabajo en Irlanda, como lo hicieron muchas personas de diferentes países africanos, y no habrían sido una carga para el Estado. Pero esto no parece aplicarse a estas mujeres.

No me importa que Irlanda ayude a personas de países seguros como Zimbabwe mientras el país lucha contra la sequía, pero sé que el costo de mantener a una familia de cinco aquí sería suficiente para sustentar a diez o veinte familias en ese país. No sólo podremos ayudar a más personas en Zimbabwe, sino que esto beneficiará a sus comunidades. Esto debería hacerse sobre una base caritativa, a través de organizaciones benéficas acreditadas y no a través de agencias gubernamentales u ONG respaldadas por el gobierno.

Por último, ya tenemos suficientes problemas con que nuestro país ceda ante una serie de irlandeses irresponsables sin tener que asumir la tarea de cuidar de las muchas personas que se han perdido en diferentes países del mundo. El asilo debería ser un lugar de refugio temporal hasta que alguien pueda regresar a su patria, y las Naciones Unidas deberían presionar a los países para que pongan sus casas en orden y permitan que sus ciudadanos regresen. Hay literalmente cientos de millones de personas hoy en día viviendo en países que sufren guerras, conflictos civiles, persecuciones severas y sequías. Si se les permitiera hacerlo, con gusto pedirían asilo en Occidente y terminarían agotando a los países que los invitaran. Por otro lado, hay países ricos que no aceptan refugiados, como Arabia Saudita, que no acepta mujeres y niños de Gaza.