España invierte 12.000 millones de euros en combatir la crisis de la sequía

Después de ver una caída del 28% en las precipitaciones desde el año pasado, España liberará miles de millones de dólares en fondos de ayuda para la sequía, dice el ministro de Medio Ambiente.

El Ministro de Medio Ambiente de España anunció el martes medidas urgentes que harán que el gobierno del país asigne 12 mil millones de euros para abordar la sequía de largo plazo que ha dañado gravemente el sector agrícola del país.

Según la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la sequía ha destruido cultivos en 3,5 millones de hectáreas.

Además de los 12.000 millones de euros, el gobierno gastará otros 3.000 millones de euros en “promover la digitalización para gestionar mejor los recursos hídricos” mediante el uso de nuevas tecnologías.

La respuesta se produce después de que 1.400 millones de euros en fondos, liberados en abril de 2023, no lograran erradicar el problema.

«Necesitamos respuestas estructurales y una inversión continua», dijo Teresa Ribera, ministra de Medio Ambiente, durante una conferencia de prensa esta semana.

Una gran parte de la última ronda de fondos se utilizará para mejorar la infraestructura hídrica y construir plantas desalinizadoras. Sin embargo, el desarrollo de la tecnología desempeñará un papel importante en la lucha contra la sequía.

A principios de este año, Ribera dijo que el gobierno necesitaba «aprovechar todas las capacidades técnicas que España ha adquirido y desarrollado durante muchos años» para hacer frente a este tipo de fenómenos meteorológicos.

España registró el comienzo de año más seco en los primeros cuatro meses de 2023 desde que comenzaron los registros en la década de 1960, siendo Cataluña en el norte y Andalucía en el sur las más afectadas.

Desde que comenzó la sequía en enero de 2022, se ha declarado una emergencia por sequía en 24 municipios de Cataluña, y el agua se ha vuelto tan escasa que las autoridades locales han tenido que recortar el uso de agua en un 80% para la agricultura y en un 25% para usos industriales. .

Se ha instado al ciudadano medio en España a reducir su suministro medio diario de agua de 250 litros a 200 litros.