La NASA ha detectado un nuevo pequeño cráter en la superficie de la luna, que probablemente fue causado por una sonda rusa que aterrizó en la luna hace unas dos semanas.
El descubrimiento fue realizado por el Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO) comparando imágenes antes y después del punto de impacto estimado, proporcionadas por la agencia espacial rusa Roscosmos.
La sonda Luna-25 se estrelló el 19 de agosto, frustrando las esperanzas de Rusia de revivir su programa lunar, latente durante mucho tiempo, con el primer aterrizaje suave en el polo sur de la Luna.
En cambio, ese premio fue para la India, que aterrizó con éxito su misión Chandrayaan-3 el 23 de agosto y actualmente está explorando la región polar con su rover Pragyan.
LRO, que ha estado orbitando la Luna desde 2009, tomó su imagen del «antes» más reciente en junio de 2022. Esta se ha comparado con una imagen tomada el 24 de agosto de 2023.
«Dado que este nuevo cráter está cerca del punto de impacto estimado de Luna 25, el equipo de LRO concluye que probablemente se deba a esa misión, más que a un impacto natural», dijo la NASA en un comunicado.
El nuevo cráter tiene unos 10 metros (32 pies) de diámetro, unos 400 kilómetros (250 millas) más pequeño que el punto de aterrizaje previsto por Luna-25.
La NASA también planea regresar a la Luna en el marco del programa Artemis, con el objetivo de construir una presencia sostenible. Los depósitos de hielo podrían explotarse para sustentar los hábitats humanos o descomponerse en hidrógeno y oxígeno para su uso como combustible para cohetes.
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